En la era digital actual, muchas personas pasan largas horas frente a pantallas de computadoras, teléfonos móviles y tabletas. Esta exposición prolongada a la luz azul emitida por estos dispositivos y la tensión ocular resultante han llevado al surgimiento de un problema de salud visual conocido como síndrome visual informático (SVI). En este artículo, exploraremos qué es exactamente el SVI, sus síntomas comunes y proporcionaremos consejos útiles para prevenirlo y mantener una salud visual óptima en la era digital.
¿Qué es el síndrome visual informático (SVI)?
El síndrome visual informático es un conjunto de síntomas que se producen como resultado del uso prolongado y repetitivo de dispositivos electrónicos con pantallas, como computadoras, teléfonos inteligentes, tabletas y televisores. También se le conoce como fatiga visual digital o astenopia informática. El SVI se caracteriza por una serie de molestias y malestares que afectan principalmente los ojos y la visión, pero también puede involucrar síntomas como dolores de cabeza y fatiga general.
Síntomas comunes del SVI:
Fatiga visual: Sensación de cansancio o pesadez en los ojos después de utilizar dispositivos electrónicos durante períodos prolongados.
Sequedad ocular: Sensación de sequedad o ardor en los ojos debido a una menor frecuencia de parpadeo mientras se está frente a una pantalla.
Irritación y enrojecimiento: Los ojos pueden volverse rojos e irritados debido a la tensión ocular causada por la exposición prolongada a la luz azul.
Visión borrosa: La vista puede volverse borrosa o desenfocada temporalmente después de un uso prolongado de pantallas.
Dolores de cabeza: El SVI puede desencadenar dolores de cabeza, a menudo localizados en la frente o en la parte posterior de la cabeza.
Dificultad para enfocar: Puede haber dificultad para cambiar el enfoque de la visión de cerca a lejos y viceversa.
Por tanto te recomendamos, hacer descansos cortos cada 20-30 minutos mientras trabajas o usas dispositivos electrónicos. Parpadear con frecuencia, y sobretodo ajusta la configuración de la pantalla (el brillo y el contraste). Deberás mantener una distancia adecuada, de aproximadamente 40-60 centímetros de tus ojos. También considera utilizar lentes con filtros de luz azul para disminuir la exposición a la luz azul dañina.